Un sueño en concreto hecho realidad para 60 familias en Estelí, Nicaragua
Familias de los barrios Óscar Turcios y Villa Esperanza de Estelí, recibieron el pasado jueves 23 de marzo, la visita del Director Ejecutivo de Holcim Nicaragua, Marcelo Arrieta, quien confirmó con mucha satisfacción el éxito del proyecto que es parte de la iniciativa 100 mil pisos para jugar, de Hábitat para la Humanidad y la Federación Interamericana del Cemento (FICEM).
El objetivo es sustituir el interior de tierra por pisos de concreto en 100 mil viviendas vulnerables en todo América Latina y el Caribe al 2028. Nicaragua ha sido uno de los primeros países en sumarse. Gracias al apoyo de Holcim, 60 familias estelianas de diferentes barrios de los Distritos II y III ya cuentan con un piso de concreto, que les permite tener una mejor calidad de vida.
“Para Holcim ha sido una experiencia maravillosa poder apoyar a estas 60 familias estelianas, sustituyendo sus pisos de tierra por pisos de concreto. Agradecemos a Hábitat para la Humanidad por habernos invitado a formar parte de esta iniciativa regional, porque juntos construimos el progreso de las personas y el planeta”, afirmó Marcelo Arrieta, Director Ejecutivo de Holcim Nicaragua.
El proyecto implementado entre los meses de enero y febrero, contó con el apoyo directo del Instituto de Promoción Humana (INPRHU – Estelí), quienes seleccionaron cuidadosamente a las familias, priorizando hogares con jefatura femenina, familias con niños y niñas menores de 6 años, adultos mayores y/o personas con discapacidad.
“En Hábitat Nicaragua estamos muy satisfechos con los resultados, y felices porque además Holcim decidió apoyar a 25 familias más, es decir que en total serán 85 familias las que tendrán un piso de concreto. Nuestra meta como país es llegar al menos a 1,200 pisos al 2028 y esta primera fase en Estelí, nos confirma que vamos por buen camino”, dijo Nancy Aróstegui, Gerente de país de Hábitat para la Humanidad Nicaragua.
Se estima que en Nicaragua alrededor del 30% de las viviendas no cuentan con un piso de concreto. Para las familias que ya lo tienen, este significa 78% menos de infecciones por parásitos, 49% menos de diarreas; 81% menos de probabilidad de anemias, y sobre todo un lugar seguro para que las niñas y niños gateen, aprendan a caminar, hagan sus tareas, jueguen y se desarrollen física y mentalmente sanos.
